Riosa
Alcaldía: D. Roberto Álvarez Fernández
Capital: La Vega
Domicilio Social: Plaza de la Constitución, 1 33160 LA VEGA
Población Año 2022: 1.805 habitantes
Teléfono: 985766006 / 985766180
Fax: 985767104
Página Web: www.ayuntamientoriosa.com
Concejo asturiano localizado en su área central a 20 kilómetros de distancia de la capital del Principado. Limita al norte con Morcín, al este con el concejo de Mieres, al sur con Lena y Quirós, que también hace de límite por el oeste. Su superficie total es de 46,49 km2.
De su estructura geológica, hay que decir que el suelo del concejo es mayoritariamente carbonífero, apareciendo terreno devoniano y de cuarcita silúrica en una pequeña extensión de la comarca occidental el primero y fuera de la cuenca del río Riosa la cuarcita. Estratigráficamente hablando se puede diferenciar tres zonas. Una primera que encuadra toda la zona sur y que se caracteriza por las intercalaciones de calizas carboneras con areniscas y pizarras. Otra en la zona central cuya característica principal es la presencia de una abundante faja pizarrosa con intercalaciones de caliza. Y por último tenemos el conjunto Canales-Piedrafita-La Esperanza y la zona Ablanedo-Grandiella, donde predominan las capas de arenisca y pizarra, apareciendo carbón entre las capas.
En cuanto al relieve del concejo hay que decir que este es muy accidentado, sobresaliendo por el oeste la sierra del Aramo con unas cimas superiores a los 1.500 metros. Destacan los picos del Barriscal con 1.734 m, el Xistras con 1.773 y sobre todo la Gamonal o Anglirú, hoy de gran popularidad por ser fin de etapa de la vuelta ciclista a España, y que sirve de límite con Quirós y Morcín. En toda la parte oriental del Aramo, se hallan un conjunto de cuevas que representan diversas carstificaciones en relación con la excavación. Por el norte destacamos las estribaciones del pico Monsacro de Morcín con una altura de unos 700 metros, y por la zona oriental tenemos los cordales de La Segada y de La Cuba que presenta el Pico Llosoriu como cota más alta con 1.000 metros. Aparte de todos estos accidentes montañosos, el concejo presenta diversos valles, que es donde se asentará la mayor parte de la población.
De su red fluvial destacaremos el río Llamo, también nombrado Riosa que nace en las pendientes del Aramo de donde recoge numerosos regatos que bajan de sus montañas. Sigue una orientación sur-norte y ya cerca de La Vega recoge las aguas del Río Xuncar por la derecha y del Grandiella por la izquierda. Abandona el concejo por Morcín donde entrega sus aguas al río Caudal.
Por lo que respecta a su clima hay que destacar la diversidad que presenta según nos encontremos en zonas de montaña o en los valles, siendo mucho más benévolo el tiempo en éstos últimos.
De su vegetación hablaremos de la sierra del Aramo nuevamente, al estar declarada como Paisaje Protegido por el PORNA. En él predominan las hayas y los acebos. En altitudes superiores a los 800 metros abundan las Matas, los arbustos y los pastizales. En las zonas ribereñas es fácil encontrarnos con castaños, robles, fresnos, avellanos y alisos en las proximidades de los ríos.
La capital del concejo es desde 1880, en el que se traslada de Felguera, La Vega, situada en el valle del río Llamo o Riosa, formado un único complejo urbano donde se concentra la mayor parte de la población del concejo.
Gracias a las explotaciones mineras, La Vega protagoniza un gran crecimiento en la década de los sesenta, atrayendo a mucha mano de obra y construyendo para ella construcciones singulares que guardan poca relación con la arquitectura existente en la localidad.
La evolución demográfica en Riosa se puede decir que tiene dos etapas muy diferenciadas. Una primera que llega hasta la década de los setenta en el que el aumento progresivo de la población era una constante, llegando a tener a principios de los 70 su cota más elevada con 3.245 habitantes. Y otra etapa que sería desde los 80 hasta nuestros días en el que la tendencia se invierte totalmente con caída paulatina del número de personas. Esto es ocasionado por la crisis de la minería, principal fuente de empleo hasta entonces en Riosa, y que unido a una falta de modernización pecuaria en el concejo, hace que se produzca un movimiento migratorio sobre todo hacia Oviedo. Sin embargo, al ser reciente la pérdida de población la estructura piramidal no se altera en demasía, presentando la zona un índice de envejecimiento no muy alto y un crecimiento vegetativo positivo. La mayoría de la población se concentra en la capital, La Vega.
Dentro de su actividad económica, en Riosa se produce un caso único, ya que aunque la mayoría de los empleos del concejo estaban representados en la actividad minera, el sector secundario solamente representaba a un 8,33% de la población activa. Este efecto tan singular fue debido a que la explotación minera del Monsacro estaba censada en el concejo vecino de Morcín, con lo que los datos de los empleos de Riosa se contabilizaban en dicho concejo.
El sector primario, tomando por base los datos del Sadei de 2000, y conociendo lo anteriormente expuesto, representaba un total del 36,96% del empleo local. El cultivo de tierras es mínimo, siendo el autoconsumo la única finalidad de tales cultivos. Respecto a su ganadería, hay que decir que existe un predominio de la cabaña vacuna orientada a la producción cárnica, siendo importante mencionar que la ganadería es una actividad secundaria, realizada sobre todo por prejubilados siendo una cuarta parte la que trabaja en ella principalmente.
Respecto al sector secundario y de la construcción, basándonos en los datos de Sadei, generaba un total del 8,33% del empleo, siendo la construcción y obras públicas las que generan más puestos de trabajo.
El sector terciario de los servicios representa al 54,71% de los empleos, siendo el comercio y la hostelería sus actividades principales. Últimamente está teniendo mucho apogeo el turismo de montaña que se realiza en el Aramo, destacando en estos últimos años el monte de la Gamonal o Angliru, visitado masivamente gracias, sobre todo, a la llegada de la Vuelta Ciclista a España hasta su cima.
Gracias a las características geomorfológicas del concejo, la vida de las gentes de la zona está marcada por dos actividades principalmente; la ganadería y la actividad minera, separada ésta en dos momentos, una en la edad del bronce y otra más cercana que nace desde mitad del siglo XIX.
De la época prehistórica son las cuevas del Aramo que constituyen el primer signo de actividad minera dentro del principado. Fueron encontradas a finales del siglo XIX al intentar extraer cobre y cobalto, siendo encontrado en su interior numerosos utensilios y esqueletos humanos que se cree tenían edades comprendidas entre los 20 y los 40 años, y una altura de entre 1,61 y 1,76 metros Los utensilios hallados eran martillos de piedra y asta, cuñas, bateas, crisoles… La extracción del mineral se hacia principalmente, partiendo la roca con fuego, fundiendo el mineral posteriormente para la obtención de cobre que sería tratado después en otros lugares. Más recientemente fueron practicadas nuevas excavaciones encontrándose nuevos elementos parecidos a los primeros, y que tras un estudio exhaustivo arrojaron una antigüedad cercana a los 4000 años, lo que permitió situar dichos hallazgos entre la etapa calcolítica y la edad del bronce. Un elemento que llamó la atención, fue la aparición de los esqueletos en galerías explotadas, desechándose la hipótesis de derrumbe o accidente como causa de la muerte.
De las edificaciones castrenses hay que decir que hay inventariados actualmente dos asentamientos. Uno de ellos localizado en La Pena´el Cochéu, en Rioseco, y que se cree tenga relación con las explotaciones mineras del Aramo. Y otro en el Pico Castiello en El Collao, aunque no ha sido excavado. Cerca de este último fueron encontradas dos lápidas de época romana, aunque sólo una es conocida y estaba dedicada a una divinidad indígena.
Pasan varios siglos sin noticias del concejo hasta que aparecen referencias de Riosa en varias donaciones efectuadas al obispado de Oviedo. De estas donaciones aparece una del rey Ordoño I de la Iglesia de Santa María de Riosa a la iglesia en año 857, aunque fue considerado posteriormente como una falsificación de comienzos del siglo XII. No obstante, está comprobado que terrenos y lugares del concejo fueron donados en su mayor parte a la mitra Ovetense, de la cual dependió durante la edad media y parte de la moderna. El obispo era quien nombraba a los regidores, o daba el poder a algún noble o eclesiástico.
Esta situación acaba en 1579 gracias a la desamortización realizada bajo mandato de Felipe II que contaba con la autorización Papal. Las gentes de Riosa compran al monarca los terrenos por un total de199.721 maravedís, legalizándose la compra en escritura con fecha de 9 de mayo de 1588, documento aun conservado en el ayuntamiento. Hasta 1880, el ayuntamiento se reunía en la localidad de Felguera, pasando posteriormente a La Vega, capital actual del concejo.
En el siglo XIX tienen lugar la guerra de la Independencia, con escasa repercusión en la zona, y las guerras Carlistas, operando por la zona el Cabecilla Santa Clara que calcinó y arrasó el registro civil. A mediados de este siglo, una real orden concedió a la fábrica de Trubia el coto minero de Morcín y Riosa, abriéndose una mina en 1846 para la extracción del carbón para posteriormente ser llevado todo ello a Trubia. Esta explotación minera es la que hoy en día se conoce como Monsacro, en el límite de Riosa con Morcín y que desde 1969 pertenece a la empresa estatal HUNOSA.
En el siglo pasado los acontecimientos más destacados fueron la participación de las gentes de la mina de la zona en los sucesos revolucionarios de 1934, que obligaron a venir hasta Riosa al entonces ministro de la guerra Gil Robles, en unión con los generales Franco, Goded y Fanjul, para presidir las maniobras militares comandadas por el coronel Aranda. Y por supuesto la guerra civil, estando el concejo con el bando republicano hasta la caída en manos nacionales.
El mayor tesoro artístico que nos puede ofrecer el concejo de Riosa radica en la belleza de sus parajes naturales, con el espacio protegido de la sierra del Aramo como atractivo principal.
Dentro de sus arquitecturas religiosas tenemos la iglesia del Espíritu Santo en Donaxuendi, del siglo XVIII. Es de un solo tramo, con cubierta de bóveda de crucería y posee una fachada realizada en sillar rematada por espadaña.
Otra iglesia interesante es La Capilla de la Virgen de las Nieves en Llamo, también del siglo XVII, destacando su interior en el que aparecen pinturas con motivos florales, aves y escenas del vía crucis.
En Grandiella encontramos la capilla de San Pedro, de planta cuadrada y portada de medio punto resguardada por un pórtico. También tenemos en Santo Adriano, la capilla del mismo nombre. Es de planta rectangular, con pórtico en el lado occidental, arco de medio punto y bóveda de cañón con cubierta de madera en el interior donde se conservan imágenes de San Adriano y de la Encarnación.
En la Xuncar contemplamos la capilla de San José, que es de planta cuadrada y retablo de 1713. A su lado se levantó otra iglesia en el siglo XX. Felguera acoge la capilla de los Remedios, que contiene un retablo policromado en su interior.
La Emita de Santa Bárbara en Villameri se encuentra en ruinas, construyéndose otra en 1964 con la misma advocación. Por último hay que mencionar la iglesia parroquial de La Vega con diversas influencias y reconstruida en 1959.
Respecto a su edificación popular tenemos en Donaxuendi la casa de Muñiz, conocida como El Palacio. Es del siglo XVIII con posteriores reformas y añadidos. Posee planta rectangular, corredor de madera, escudo y dos inscripciones. En Felguera tenemos el palacio de Miranda, del siglo XVIII y de estilo tradicional Asturiano. También en Felguera se encuentra La Corralá que fue sede del antiguo ayuntamiento.
Por todos los pueblos podemos divisar diversas casonas señoriales con escudos, corredores y que diferencian a éstas de las casas más comunes.
Entre sus fiestas, destacamos:
En el mes de junio, son las fiestas de San Antonio en La Vega, el día 13, también son las fiestas de El Corpus en L´Ará. En el mes de septiembre, son las fiestas de la Virgen de los Remedios en Felguera el día 8, Santo Adriano el penúltimo domingo de este mes y la Virgen del Las Nieves en Llamo el último domingo del mismo mes. En el mes de octubre es Nuestra Señora del Rosario con ofrecimiento de ramo de flores.
Todas las capillas que están en el concejo, celebran sus fiestas y romerías, siendo importante mencionar el carácter escalonado de las mismas, como lo demuestran los festejos de La Virgen de los Remedios en Felguera, Santo Adriano en el pueblo del mismo nombre, y la Virgen de las Nieves en el Llamo, que se celebra el último domingo de septiembre. Las tradiciones siguen teniendo lugar en todas ellas, no pudiendo faltar en ninguna de ellas, el ofrecimiento del ramu y su posterior subasta.
Su escudo es cortado en dos.
El primer cuartel, representa sobre campo de azur, la Cruz de los Ángeles, en clara referencia a su dependencia obispal durante siglos.
El segundo cuartel, nos enseña unas montañas que representan la sierra del Aramo, accidente geográfico que tanto significa para el concejo.
Al timbre corona real, cerrada.
En uso sin sanción legal, está copiado de la representación de Bellmunt y Canella, siendo utilizado por la corporación actual, aunque nunca se acordó su empleo.
Gran enciclopedia Asturiana.
Autor: Silverio Cañada.
Geografía de Asturias.
Ediciones: Prensa Asturiana S.A.
Asturias a través de sus concejos.
Ediciones: Prensa Asturiana S.A.
Heráldica institucional y vexilología del Principado de Asturias.
Ediciones: Principado de Asturias.
Autor: Eduardo Panizo Gómez.